Playas inteligentes
Actualmente vivimos en un mundo conectado donde las tecnologías móviles son un medio de comunicación muy importante y continúan concentrando gran parte de los avances tecnológicos para preparar las ciudades del mañana. Las oportunidades que existen en el campo de la tecnología son infinitas, por eso el objetivo de las "Smart Beach" o "Playas Inteligentes" es proteger la calidad ecológica y la salud de los ambientes naturales como por ejemplo las playas, que es una de las principales preocupaciones de las autoridades públicas y los usuarios ya que son destinos turísticos por excelencia.
A pesar de que cada vez más playas están empezando a utilizar la tecnología a su favor, las que han implantado soluciones tecnológicas todavía no son mayoría. Además, han comenzado con pequeños pasos, decantándose solo por alguno de los puntos que podrían convertirlas en destinos realmente inteligentes (en el sentido tecnológico de la palabra).
Mientras algunas otras optan por el wifi, que ya se ha implementado en varias playas otras localizaciones han elegido desarrollar soluciones más curiosas. Un ejemplo son las "Smart Palm Tree", donde el público podrá beneficiarse del acceso directo y libre a Internet mientras que proporciona valiosa información pública que cubre una gama de temas, incluyendo las previsiones meteorológicas y guías de orientación. Lo más importante, estas estructuras son totalmente autosuficientes gracias a sus paneles solares cristalinas mono, que proporcionan hasta un 21 por ciento de eficiencia ".
En Castellón, España el verano pasado se ponía en marcha un programa de pulseras inteligentes para localizar a los niños. Estas pulseras disponen de un chip que permite grabar los datos de contacto de los familiares de los menores para que, en caso de que se pierdan en medio de la multitud o en un momento de despiste, sea fácil localizarlos.
También en la provincia de Castellón, en concreto en Oropesa, se localiza otra de las soluciones que poco a poco están llegando al litoral. En este caso, urinarios inteligentes. Ubicados en La Conxa, Morro de Gos y les Amplàries se controlan desde la Oficina de Turismo y el Ayuntamiento del municipio, que se encargan de gestionar a distancia los horarios de apertura y cierre. Cuentan con un servicio de autolimpieza y su uso es gratuito.
Otros servicios tecnológicos que empiezan a dejarse ver por las playas son aplicaciones con información actualizada sobre las plazas de aparcamiento, zonas para cargar los teléfonos con energía solar o la posibilidad de realizar pagos con el móvil a la hora de alquilar algunos de los pasatiempos típicos como: la banana, motos acuáticas, paseos en lancha, etc.
Con el tiempo también podrán llegar a implementarse pantallas que muestren en tiempo real el índice UV, el indicador que mide la intensidad de radiación ultravioleta proveniente del Sol. Este podría ser un buen recordatorio para los bañistas de la necesidad de protegerse la piel y animarles a sacar la crema de protección solar.
Hasta ahora, ninguna playa reúne todas estas características, pero sí que hay muchas que ponen a disposición de los bañistas ciertas apps que agrupan la información relevante para la jornada playera. Un ejemplo es iBeach, una aplicación gratuita que proporciona información marítima, meteorológica y propia de una playa como el color de la bandera, la presencia de medusas o la calidad del agua. Esta información se recopila gracias a Coastal Water Management (COWAMA), un sistema de información integral de previsión de la calidad de las aguas y zonas de baño que permite predecir en tiempo real el estado de las playas.
La aplicación también aporta datos sobre los locales que hay en los alrededores de la playa y otra información de interés. Además, los propios usuarios pueden enviar nuevos detalles o curiosidades acerca del destino turístico que visitan. La app reúne datos de 3.500 playas, por lo que los bañistas pueden consultar todo lo referente al lugar en el que planean pasar un día de mar y sol antes de emprender el viaje.
Ahora la tecnología puede convertirse en la mayor aliada para las playas, mirando al futuro tal vez próximamente veamos sombrillas que se autorregulen en base a la orientación del sol o una app que permita reservar un lugar en la arena donde dejar la toalla, también parecen opciones atractivas para las zonas de costa. Sin embargo, hasta que llegue la auténtica revolución de las playas inteligentes, la mayor presencia tecnológica seguirán siendo los teléfonos de los bañistas, esos de los que no se pueden separar ni en vacaciones.
Pero no todo es innovación y nuevas tecnologías. Las auténtica playa inteligente también debe reunir otras características, desde accesos fáciles, seguros y adaptados para personas con discapacidad hasta papeleras y contenedores que permitan el reciclado o un plan de emergencia para hacer frente a accidentes o desastres, vigilancia, un equipo de primeros auxilios y puntos de agua potable.
La mejor parte de todo esto es que es totalmente favorable al medio ambiente.